Baraja creada por Robert Wang, quien toma la psicología analítica junguiana como puntal para el alumbramiento de un mazo arquetípico que denota la integración del alma (o individuación).
 
Los Arcanos Mayores no tiene numeración ni nominación puesto que abarcan un proceso de reconocimiento interior del self que implica una vía sin un orden definido sino más bien una exploración de la conciencia que pasa por diferentes senderos.
 
Cada uno de ellos escenifica su particular fuente simbólica con mandalas (muy usados por Jung para la interpretación de sueños y para facilitar la imaginación activa). Podemos a su vez relacionarlos con arquetipos fundamentales del inconsciente colectivo: Padre (Emperador), Madre (Emperatriz), Niño (El El Sol), El Viejo Sabio (Ermitaño), La Sombra (El Diablo), Self (El Mundo).
 
Las figuras de la corte cambian el caballo por la Princesa que es de esta forma el opuesto complementario del Príncipe o Paje, así como la Reina tiene una función de espejo con el Rey y viceversa (todo ello en resonancia con el ánima y ánimus o principio femenino y masculino propio de la teoría junguiana).
 
Los Arcanos Menores están predispuestos como las cuatro funciones básicas: pensamiento/sentimiento/intuición/sensación cada una de las cuales se relaciona de esta forma con los elementos y con su particularidad en el Tarot completando así este mapa del viaje del alma.
 
 ©AbraxadabraLab